Culto popular a la Virgen de Cupilco


A finales del siglo XVIII, la estatua de la Virgen de la Asunción de María, de probable origen español, fue encontrada en un barquito de madera por unos ancianos del poblado Ayapa junto con una caja de joyas, una corona y una medialuna plateada.

© Museo Comunitario de Cupilco
© Museo Comunitario de Cupilco

Es así como durante siglos, los cupilqueños han defendido a la Virgen de Cupilco; primero de los españoles, luego de los franceses y finalmente de las políticas radicales desfanatizadoras (1920-1936) de Tomás Garrido Canabal, que culminaban en actos públicos de quema de imágenes religiosas.

Desde inicios del siglo XIX, existe una confraternidad femenina encargada del cuidado y cambio de vestidos de la Virgen que asigna rotativamente a una familia la responsabilidad de dicho cambio cada quince días.


Desde los años 50, el Poblado Cupilco hospeda una iglesia sucesivamente transformada en Parroquia (1976) y luego en Santuario (1991), donde fue colocada la Virgen que durante la visita a Villahermosa del Papa Juan Pablo II fue erigida Patrona de Tabasco (1990).